Buenafuente y su manifiesto

Después de algunas días y con la bilis todavía en el estomago por las criticas que sufrió, estaba claro que Buenafuente tenía que decir algo. Esta respuesta ha tardado bastante pero ha merecido la pena.

Ahora os pongo lo que dijo y mi respuesta:

—Las redes sociales son importantes pero no son el centro del universo. Son una herramienta más de la revolución tecnológica.

Y una forma eficaz de decirle a alguien lo que se piensa, aunque veo que a ti no te ha gustado.

—Tenemos mucha tecnología a nuestro alcance pero se nos ha acabado la paciencia, las ganas de escuchar, debatir y enriquecernos. Nos vale con el ruido, el nuevo opio para estos tiempos encabronados.

Ni se ha acabado la paciencia, ni las ganas ni nada. Sencillamente ocurre, que cuando uno es un poco metepata y gracioso, se espera de él que lo sea siempre, y sobre todo, que no depende de la persona entrevistada.
Si te hubieras portado con la Sinde como con el Obispo o como con otros invitados no estaríamos así ahora.

—El ruido no cambia las cosas. La acción, sí.

Y ese caso ¿por qué no haces algo en tu programa?

—»Seguir» a alguien en una red social no debe ser sinónimo de acoso o coacción. La libertad de expresión está por encima de todo y de todos.

Una parte de la libertad de expresión es la crítica.

—El anonimato es la máscara de los cobardes. El insulto, su única manera fácil de expresarse.

Si tienes quejas sólo tienes que ver el perfil, directamente lo podrías ver o sino seguro que muchos te darían sus datos si se lo pides.

—Los que me atacan no me conocen, ni yo los quiero conocer.

Atacar no es decir algo que no gusta. Te diría que si sabes lo que es pero teniendo en cuenta que en TU BLOG no aceptas comentarios, esta claro que lo sabes bien.

—¿Para qué y cómo usaremos tanta tecnología?

Para el bien y para el mal como todo.

—Podremos ser una sociedad interconectada y justa, que reclama información libre a la vez que da voz y oportunidades, o una red de ociosos burgueses quejicas e intolerantes. De nosotros, depende.

Pues ya sabes, aplícate el cuento.

—Haríamos bien en invertir toda esa rabia que circula por internet, en salir a la calle, movilizarnos, decirles a los culpables de la crisis que no tragamos.

Y si sabes tanto, ¿cómo es que no haces nada en programa? Es una pregunta retórica, está claro porque criticas lo justo.

—Hay que mover más el culo y menos el ratón del ordenador. ¿Hacen falta más ejemplos de revoluciones, de gritos populares por una sociedad más equilibrada?

Lo que hace falta es que alguien se levante, una cara visible y por desgracia ahora mismo no hay nadie.

—Hay más gente buena que mala. Siempre ha sido así y siempre lo será. Yo trabajo para los buenos.

Tu trabajas para el que te paga y punto. Sólo hay que ver el cambio que diste cuando te fuiste al a Sexta.

—Los periodistas (o lo que queda de ellos) están embobados con las redes. Utilizan las «entradas» como noticias (la mayoría de veces es mera cotidianidad) y no se molestan en confirmar o documentar. Una prueba más de la decadencia errática de la profesión.

Pues tienes razón, en un blog leí que la credibilidad de los periodistas se mide por el tamaño de sus tetas, por desgracia es así, aunque lo peor de todo es que tu criticas… y estas muy cerca de esta idea.

—La nueva censura son los intereses empresariales de las empresas de comunicación.

Totalmente de acuerdo.

—Búscate las fuentes de información. Aplica tu sentido común, selecciona y acércate a la verdad.

Totalmente de acuerdo. Para eso se pueden visitar por internet.

—Y, por último, recuerda: mucho mejor un buen arroz con los amigos de verdad que dos horas en internet.

Pues para mi, mejor un buen Jack Daniel’s con amigos, que tu buen arroz y programa.

Esto es todo por hoy, mañana os comentare el desmadre de Sony y su PSN que promete ser ÉPICo 😉

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